jueves, 23 de febrero de 2012

los acuerdos y la actualidad

Rafael Navarro-Valls, "La eclosión de los pactos entre la Iglesia y el Estado", Zenit, 21/02/12:

" Hoy vivimos una época jurídica marcada por una eclosión de leyes especiales, informal o formalmente pactadas con diversos grupos sociales. Leyes que procuran adaptarse a la peculiar estructura de cada uno de los factores que esos grupos representan, ya se trate del factor laboral, sindical o sanitario. Se valora especialmente la adaptación de las leyes especiales a la plasticidad de la vida social, frente a la rigidez de las leyes comunes, que no logran adecuarse a las flexibles exigencias de un mundo jurídico plagado de matices. El que el factor religioso cuente con su legislación especial plasmada en acuerdos no es cosa de otro mundo."

 "Los pactos formalizados en instrumentos jurídicos sólidos, es fuente de estabilidad sociológica, uno de cuyos núcleos duros es la libertad religiosa. Estos pactos, desde luego, evolucionarán al compás de las propias necesidades jurídicas. Conviene recalcarlo, pues las pasiones políticas podrían, en ocasiones, arruinar fórmulas jurídicas que se han demostrado válidas y estabilizadoras."

Sentencia de la Semana: Tribunal Federal de Distrito, Washington, 22/02/2012, en el caso "Stormans Inc. v. Mary Selecky". Las normas de 2007 que obligan a la dispensa de medicamentos (Emergency Contraception Plan B) no son neutrales, no son de general aplicación, fueron creadas para obligar a los farmacéuticos objetores a dispensar esos medicamentos contra su conciencia; son inconstitucionales.

viernes, 17 de febrero de 2012

revisión de los acuerdos

Rafael Navarro-Valls, "La revisión de los acuerdos entre el Estado y la Santa Sede: entre necesidad y posibilidad", ElConfidencial.com, 16 de febrero de 2012. Texto completo aquí.

"Las veces que, desde entonces, se ha planteado hipotéticamente su revisión, ha sido por algunos sectores ideológicos que desconfían de lo que pudiéramos llamar “legislación especial” sobre cultos. Se trata de la posición de los amantes de la legislación común. Postura más o menos razonable, si no fuera ahistórica y regresiva".

"Si desde estas consideraciones fijamos ahora nuestra mirada en el vigente “concordato” habrá que convenir que las inevitables fricciones o temas en discusión se han ido resolviendo a través de fórmulas imaginativas que, evitando aplicar la piqueta a una estructura aceptable, ha dado respuestas inteligentes a nuevas necesidades, sin abrir formalmente un proceso de revisión."

"Las pocas veces que el Tribunal Constitucional ha debido afrontar cuestiones relacionadas con los Acuerdos (capellanes castrenses, matrimonio, enseñanza de la religión, idoneidad del profesorado) nunca ha puesto en duda su constitucionalidad, lo que entonces sí que haría necesaria una revisión."

"Y la posible denuncia unilateral no es factible, entre otras cosas porque la rotura unilateral de un concordato solamente es posible cuando el propio tratado lo prevea o cuando haya una violación gravísima por una de las partes. Ya se entiende que esta situación es absolutamente irreal en el actual panorama sociológico y político español."

sábado, 11 de febrero de 2012

versiones

Hace un tiempo que no ofrezco versiones. Ahora ando siguiendo la música electrónica de Biosphere. Pero hoy recordé Sweet Child O'Mine, original de Guns N 'Roses, versión de Sheryl Crow. También esta semana me encantó Mirabilis Structura de Max Cobacho.

Mañana es domingo y parece que viene frío.

jueves, 9 de febrero de 2012

leña al mono que es de goma

En esta ocasión no voy a hablar directamente de Derecho. En el 38 Congreso del PSOE los candidatos hicieron una obligada alusión a la revisión de los Acuerdos 1979 (curioso, siempre se olvidan de los de 1976 y 1994, ¿sabrán que existen?). Europa laica muestra su sorpresa: "ocho años en el gobierno, ¿y ahora me vienes con éstas?".

Al margen de si se trata de un problema de caspa anticlerical o no (pregunten a la ex-Vicepresidenta por su nuevo champú), tengo para mí que la referencia a los Acuerdos es una socorrida muletilla que puede emplearse a placer, en un sentido ("acabemos con los privilegios") o en otro ("no nos planteamos cambiar el actual sistema"). El camaleón cambia de colores según la ocasión, recordaba el Profesor de la Oliva a propósito de otro asunto. En su momento, me dediqué a recoger las noticias de prensa que dejan constancia de los cambios camaleónicos al respecto:

“El ministro de Justicia recuerda a la Iglesia que su futuro está en la autofinanciación”, en La Vanguardia; 24 de Julio de 2005, “El Gobierno apuesta por el cumplimiento generoso de los acuerdos con la Santa Sede”, en El País; 13 de Julio de 2005, “López Aguilar rechaza ahora la reforma de la relación Iglesia-Estado”, en La Gaceta de los Negocios; 13 de Julio de 2005,“El Gobierno «no modificará» los acuerdos con la Iglesia”, en El Mundo; 30 de mayo de 2005, “El ministro de Justicia dice que no es "sostenible" financiar a la Iglesia indefinidamente”, en El Pais; 3 de marzo de 2005, “El Gobierno no modificará los Acuerdos Iglesia-Estado en esta legislatura”, en ABC; 5 de mayo de 2004, “El Gobierno reconoce que planea reformar los acuerdos Iglesia-Estado” en ABC; 16 de enero de 2006, “López Aguilar, que participó en los «Desayunos Informativos» de Europa Press, explicó además que «toca y razonablemente» revisar el Acuerdo entre el Estado español y la Santa Sede sobre asuntos económicos, firmado en 1979”, en La Razón.

Leña al mono, que es de goma. Los Acuerdos son un mono de goma particularmente caro a ciertos políticos. Tengo para mí que el tema volverá una y otra vez a la palestra (“ Canis reversus ad suum vomitum ”, et “ Sus lota in volutabro luti” II Pet. 2, 22, hoy me ha dado por el latín) dependiendo de si aparece en el horizonte algún otro simio con el que practicar el boxeo sin temor a salir lesionado. ¿Una nueva acción bélica del tío Sam? ¿Una reforma laboral? ¡Quién sabe! Desde luego, como se entere Peter Singer de que los políticos españoles practican el boxeo con simios, vamos a tener un conflicto internacional de aúpa...

Amigos, no hace falta que Rubalcaba ni que Chacón se pongan a reformar, suprimir o enmendar Acuerdos. Del trabajo sucio, a la chita callando, ya se encarga nuestro Tribunal Constitucional. Sí, sí, ése que "para acercarse a los ciudadanos" organiza plenos fuera de su sede. O sea, que organiza giras como si de una buena banda de rock se tratara; habrá que estar atentos al Constitutional Court Tour 2012... A lo que voy: el Tribunal Constitucional ya se "encarga de cargarse" los Acuerdos; vean este artículo de Rafael Navarro-Valls, del que deduzco (¿apresuradamente?) que el sistema de selección de profesores de religión católica (artículo III de este Acuerdo) ha sido enterrado por la "Pascual Sala Blues Band".